Te recibí con gusto porque ya te necesitaba, pero también con desconfianza porque el anterior me había tratado de la patada, puro llorar, puro sufrir, entonces no me juzgues porque me dabas miedito... Ya sé que no se vale comparar pero así somos las mujeres, no pude evitarlo, quería asegurarme de que no me hicieran lo mismo que la vez pasada, entonces te traía bien checadito. El pasado primero era pura dulzura, demasiado bueno para ser verdad y resultó ser de lo peor...
En cambio tú... desde el principio hiciste las cosas bien, tranquilo, me dejaste ser a mi solita, sin darme falsas esperanzas de que ibas a resolverme la vida. Me diste varias sopresas, algunas muy buenas y otras malas... le diste un giro a mi vida de 180 grados, me hiciste reir, me hiciste que me enojara muchisismo contigo, me hiciste sentir triunfadora, derrotada, querida y a veces muy sola... tu también me hiciste llorar pero de un modo diferente, más bien, me hiciste aprender, me hiciste luchar y aunque ni yo misma lo crea me hiciste cambiar... Siento que nunca podré olvidarte...
Pero ahora me tengo que despedir de ti.. y lo hago con tristeza porque te me vas pero también con alegría, porque me diste recuerdos padrísimos... De todos los sentimientos agridulces que guardo hacia a tí creo que el agradecimiento predomina sobre todos... En fin, ya llegó tu sucesor, aver que tal me trata, pero no quería que te fueras sin decirte: GRACIAS POR TODO 2007...
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